Enrique Bátiz nació en la Ciudad de México en 1942 y, desde chiquito, a los cinco años, ya se veía que la música era lo suyo: a esa edad dio su primer concierto de piano. Más tarde, se fue a Nueva York, donde estudió en la prestigiosa Juilliard School, una ciudad que ha visto nacer y consolidarse a grandes artistas.

El fundador de la OSEM y su legado musical
En 1971, Enrique Bátiz fundó la Orquesta Sinfónica del Estado de México (OSEM) y la convirtió en un referente. No se conformó con tocar en casa: llevó la música clásica por todo el estado y después por el mundo. Bajo su batuta, la OSEM sonó en México, Estados Unidos, Europa y Asia. También dirigió como invitado en varias orquestas internacionales.
Polémicas y acusaciones de Enrique Bátiz
En 2018, varios músicos de la OSEM denunciaron haber sufrido abusos por parte de Enrique Bátiz ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México. En redes sociales circularon videos donde Bátiz los trataba con groserías y de forma denigrante. Las denuncias fueron declaradas improcedentes.

Al ver esto, la violinista suiza Silvia Castan lo acusó públicamente de violación tras haber sido invitado a dirigir en la Symphonisches Orchester Zürich en1996. Según algunos medios, se llegó a un acuerdo privado por ambas partes, pero no se conocieron más detalles.
¡Un concierto de otra galaxia! Sinfónico de Star Wars en Metepec
Un legado complejo
Enrique Bátiz fue una figura clave en la música clásica en México. Su talento lo llevó a dirigir orquestas de talla internacional, pero también estuvo envuelto en denuncias que generaron controversia. Salió de la OSEM por supuestos problemas de salud debido a que padecía Parkinson, pero ocurrió casi a la par de toda la polémica.
Su historia deja abierta una pregunta que sigue dando de qué hablar: ¿se puede separar la obra del artista?



