A tan solo una hora de Toluca, el Pueblo Mágico de Tepotzotlán resguarda una joya cultural que cautiva por su esplendor arquitectónico y su riqueza histórica: el Museo Nacional del Virreinato, ubicado en el antiguo Colegio de Novicios de la Compañía de Jesús. Este espacio es ideal para una escapada vacacional donde convergen arte sacro, arquitectura barroca y siglos de historia virreinal.
El museo ofrece una experiencia envolvente desde su fachada. Su estilo barroco, perfectamente conservado, da la bienvenida a una vasta colección de objetos que datan de la época colonial. Entre pinturas, esculturas, textiles y mobiliario, los visitantes pueden apreciar cómo se entrelazan el pasado religioso, artístico y social de la Nueva España.
¿Qué encontrarás?
Uno de los mayores tesoros del recinto es la iglesia de San Francisco Javier, cuyo interior alberga retablos de deslumbrante belleza diseñados por el maestro oaxaqueño Miguel Cabrera y ejecutados por el escultor Higinio de Chávez en el siglo XVIII. Estas piezas monumentales, verdaderos altares visuales del arte churrigueresco, convierten la visita en un viaje estético inolvidable.
¿Te gusta el drama? No te pierdas la Ópera «Pagliacci» en Toluca
Entre sus exposiciones permanentes destacan
- Artes y oficios de la Nueva España
- Monjas coronadas, la vida conventual femenina
Estas permiten asomarse al universo íntimo y cotidiano del virreinato. Fue declarado Monumento Nacional en 1963 por el Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Además, el Museo Nacional del Virreinato renueva continuamente su propuesta cultural con exhibiciones temporales y actividades mensuales como conciertos de música barroca.
La experiencia museográfica se enriquece con más de tres siglos de historia materializada en:
- Orfebrería
- Herrería
- Arte plumario
- Vestimentas bordadas
- Joyería en oro y plata
- Armas antiguas
- Cerámica de Talavera
Obras de artistas como Cristóbal de Villalpando y el propio Miguel Cabrera dan testimonio de la fuerza expresiva del arte novohispano.
En el exterior, se conserva un reloj mecánico del siglo XVIII, acompañado de una espadaña —estructura con tres campanas— que, hasta hoy, sigue marcando el paso del tiempo. Por su parte, la imponente arquitectura del templo de San Francisco Javier continúa siendo uno de los mayores exponentes del barroco en América.
¿Ya se te antojó visitarlo?
El museo abre de martes a domingo, de 9:00 a 18:00 horas. La entrada general cuesta $90 pesos, y es gratuita para menores de 13 años, adultos mayores, personas con discapacidad, estudiantes, docentes y jubilados con credencial vigente.
Además, para complementar tu visita, no te pierdas la Presa de la Concepción, también conocida como el Acueducto de Xalpa, considerado el más alto de América Latina. Con sus 43 arcos, que hoy forman parte de un parque ecoturístico, se convierte en el escenario perfecto para una caminata al aire libre.
Y si el hambre aprieta, a pocos kilómetros se encuentra San Manuel de los Magueyes, un rincón donde el pulque es rey. Aquí se cultiva el maguey y se aprovecha cada parte de la planta para elaborar artesanías y platillos con raíces prehispánicas.
Visitar el Museo Nacional del Virreinato es abrir una puerta al pasado, entre retablos dorados, silencios conventuales y arte que sigue latiendo entre muros centenarios.
