Muchos sectores se han visto afectados a raíz de la contingencia por COVID-19, uno de los más significativos ha sido el de la música, pues fue obligatorio posponer o incluso cancelar cientos de festivales y conciertos por todo el mundo para evitar las conglomeraciones masivas. Sin embargo, la industria de la música ha buscado soluciones para entretener a las personas y, sobre todo, para poder recuperarse económicamente de alguna manera.
Hace unos días te habíamos compartido una noticia esperanzadora (https://bit.ly/3bl1ca1), en la cual te platicamos que el Foro Temple Live en Fort Smith, en Arkansas, EE. UU, sería sede del primer concierto de rock en vivo este viernes 15 de mayo. Travis McCready, vocalista de la banda de country Bishop Gunn, eran quien presentaría los mejores éxitos de su trayectoria artística. Y, aunque no todos pudiéramos ir, la verdad es que esta noticia nos había regalado un poquito de esperanza, pues era como un pasito más cerca para regresar a la normalidad.
Y sí, todo era emoción y felicidad hasta que Asa Hutchinson, el gobernador de Arkansas, cancelara el evento por no cumplir con todas las medidas: “Aprecio que los propietarios del lugar trabajen para hacer cumplir el distanciamiento social y el uso de máscaras para proteger a los asistentes al concierto, pero el concierto permanece fuera de la directiva pandémica del estado”, explicó en un comunicado al New York Times.
Los organizadores ya habían considerado diferentes medidas como las capsulas en las que solo podrían estar de 2 a 12 asistentes; solo entrarían 200 personas, 80% menos de la capacidad del foro; se le proporcionarían cubrebocas a todos los asistentes; en la entrada, las personas deberían pasar por filtros de temperatura; no podrían ingresar más de 10 personas juntas al baño e incluso se estaría desinfectando el lugar antes, durante y después del concierto.
Ante la negativa del gobernador de Arkansas, Mike Brown, un representante de Temple Live manifestó:
“La directiva es discriminatoria porque el virus no sabe si está en la iglesia, en una escuela secundaria o en un lugar de música. No es que tenga nada en contra de la iglesia, pero si puedes ir a una iglesia y es una asamblea pública, no hay diferencia. ¿Cómo está bien que un grupo tenga una reunión pública y que un lugar de música no tenga la misma oportunidad?”
¿Tú qué opinas?