Los eventos masivos ya han quedado descartados de forma definitiva hasta que la situación por el COVID19 se estabilice. Y tal y como los conciertos se han transportado a los live stream , parece ser que la marcha de orgullo LGBT+ seguirá los pasos de la industria de la música para poder seguir adelante.
Por fin se ha anunciado que la edición número 42 de este movimiento social sí se llevará a cabo el próximo 27 de junio a través de una transmisión en vivo de las 12 a las 22 h. Durante la transmisión se contará con la participación de personalidades comprometidas con la causa, organizaciones de la sociedad civil y talento musical. Esperamos que pronto se revela la line-up.
El origen e importancia de esta manifestación social
Remitiéndonos a los orígenes de este movimiento, el contexto es el siguiente:
La primera Marcha del Orgullo en México se realizó en junio de 1978, ocho años después de que se realizó la primera en Nueva York y Los Ángeles, en EEUU, motivada por los disturbios de Stonewall en junio de 1969, una redada policial a dicho lugar frecuentado por la comunidad gay.
En esa época, la homosexualidad estaba condenada por la opinión pública y la poca tolerancia hacia estas preferencias, así, la arbitrariedad de la policía y el maltrato a los jóvenes, a quienes arrestaban por su orientación sexual, desataron la violencia y se provocó la rebelión.
A partir de ese momento, se organizaron protestas y los activistas se atrevieron a tomar las calles y se organizaron para promover los derechos de la comunidad LGBT. El año siguiente, 28 de julio de 1970, se organizó la primera marcha de orgullo gay en Estados Unidos.
La historia de la Marcha de Orgullo Gay de México
Con el referente directo estadounidense, la comunidad LGBT+ de México se atrevió a salir a las calles un 2 de octubre de 1978, congregándose en el Monumento a los Niños Héroes en el Bosque de Chapultepec.
La marcha de ese entonces no fue por Reforma, pues un escuadrón de policías bloqueaba esta vía de tránsito, sino por la calle paralela, Río Lerma, en la colonia Cuauhtémoc. La meta era llegar hasta el Hemiciclo a Juárez, en el Centro Histórico, pero las autoridades pidieron que cambiaran la ruta. Terminaron en el Monumento a la Revolución, más cerca del punto de partida.
El número de integrantes de aquella primera marcha fue apenas considerable, ya que en aquella época todavía existían las redadas para perseguir a la gente homosexual. Además, los insultos y las burlas predominaron de manera desagradable.
Al año siguiente, sí comenzaron a marchar en la Avenida Paseo de la Reforma. Para el tercer año, se congregaron unas 150 personas y la policía quiso reprimirlos, sin embargo, la gente que solo miraba se les sumó y terminaron siendo más de 1.000 personas.
Durante los años 80 las consignas eran a favor de los derechos y tratamientos dignos para las personas con VIH/Sida.
Un dato interesante del movimiento LGBT+ mexicano
El cartel para la marcha número 41, está inspirado en el baile de los 41, como se conoce a la redada ocurrida en una casa de la colonia Tabacalera en noviembre de 1901, cuando la policía detuvo a 41 homosexuales, la mayoría de familias aristocráticas y algunos vestidos de mujer.
Nunca se despejó la duda de quiénes habían caído en aquella redada, pero El Popular, una publicación de la época, anotaba que «todos son pollos gordos, algunos riquillos que la portan; criados en paños azules».
Y una de las cosas más polémicas y wow de este hecho fue que, según las malas lenguas, uno de los detenidos era Ignacio de la Torre, el yerno del presidente Porfirio Díaz. Evidentemente vivimos con la incógnita hasta hoy en día.
En una crónica sobre este episodio publicada en la revista Letras Libres, el escritor mexicano Carlos Monsiváis relató que, aun cuando los reportes de la prensa insistían en que los detenidos eran 42, al paso de los días la cifra se ajustó a 41, pues por órdenes de Díaz se eliminó a De la Torre de la historia del evento. El poder es el poder, amigos.
Así, desde entonces el 41 se vio relacionado con los homosexuales y en la Revolución Mexicana, no hubo Batallón, Regimiento o División 41.
¿Por qué? Bueno, de acuerdo a los medios impresos de la época, esos 41 que fueron encontrados en el “bailecito” fueron obligados a barrer las calles vestidos de mujer y algunos otros terminaron presos en Yucatán.