La violencia de género no es una broma y año con año los casos van en incremento, tan solo durante la pandemia en el mes de mayo las denuncias por violencia a través de la línea 800 108 4043 del Consejo Estatal de la Mujer aumentaron en un 60%.
Además de ello, los feminicidios también van en aumento, hasta abril, este delito había tenido un alza del 45%.
Dejemos de normalizar los arrebatos violentos de las parejas, un feminicida puede estar a tu lado.
El Violentómetro
Creado por el Instituto Politécnico Nacional en 2009, el Violentómetro es una herramienta que permite a las mujeres estar alerta y detectar cualquier manifestación de violencia por parte de sus parejas, así como en ámbitos sociales, laborales y familiares.
Fue parte de la investigación denominada Dinámica en las Relaciones de Pareja, del Programa Institucional de Gestión con Perspectiva de Género, en la que se aplicó una encuesta a más de 14 mil estudiantes de nivel medio superior y superior del IPN, lo que representó el 10 por ciento de la población total.
Es por ello que en el Estado de México diversas instancias como el Consejo Estatal de la Mujer, perteneciente a la Secretaría de Desarrollo Social, y la Fiscalía General de Justicia de la entidad, entre otras, difunden ampliamente su uso.
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Se trata de un material gráfico en forma de regla que para su medición cuenta con tres niveles diferentes colores que son la escala de violencia y a cada uno se le atribuye una situación de alerta o foco rojo.
Sin embargo, las manifestaciones que se muestran pueden ser experimentadas de manera intercalada.
Los tres niveles del violentómetro
Nivel 1: ¡Ten cuidado!, se encuentran las bromas hirientes, el chantaje, mentiras, engaños, celos, ignorar, descalificar, hay humillaciones en público, controlar y prohibir amistades o familiares.
Nivel 2: ¡Acciona!, no te dejes destruir; la violencia aumenta a través de destruir artículos personales, manosear, caricias agresivas, golpear “jugando”, pellizcar, arañar, empujar o jalonear.
Nivel 3: ¡Necesitas ayuda profesional! Las mujeres son víctimas de violencia física, abuso sexual, amenazas con objetos o armas, violaciones, mutilaciones y acciones que pueden llevar a la muerte.
El Violentómetro permite detectar las manifestaciones más sutiles de violencia como bromas, chantajes, celos, y humillaciones en público; posteriormente, manoseos, caricias agresivas, golpes “jugando”, empujones, jalones y, en el último rubro, amenazas con objetos o armas, amenazas de muerte, abuso sexual y violación, hasta llegar al asesinato.
