Hoy celebramos la conmemoración de uno de los días más gloriosos para la humanidad: la caída del Muro de Berlín. Es posible que no te sepas la historia completa de, primero, por qué se instauró un muro y, segundo, por qué cayó, así que hoy te la resumimos.
Al Muro de Berlín le llaman “el gran fracaso del comunismo” y el “Muro de Protección Antifascista” y se convirtió en la barrera que por décadas impidió a muchos ciudadanos huir de la miseria o reunirse con sus familias.
El origen
El Muro de Berlín fue el resultado de la Segunda Guerra Mundial. Al final de esta, Alemania se rindió ante los Aliados, un grupo de países occidentales, incluidos Reino Unido, Estados Unidos, Francia y la Unión Soviética.
Con este hecho, el país quedó dividido en cuatro zonas de ocupación, cada una bajo influencia de estas potencias.
Berlín, el protagonista de la historia, estaba en la zona soviética, pero como era la capital de Alemania se decidió que también se dividiría en cuatro áreas, una controlada por cada uno de los cuatro países. Sin embargo, pronto se hizo evidente que la Unión Soviética tenía ideas muy diferentes a las demás acerca de cómo debería funcionar su sección.
Para 1949, Alemania tenía “dos países separados”: La República Federal de Alemania (Alemania Occidental), siguiendo el modelo capitalista de Reino Unido, Estados Unidos y Francia y la comunista República Democrática Alemana (RDA) (Alemania Oriental), perteneciente a la Unión Soviética con un sistema de partido único y economía planificada.
En la Alemania Federal la gente tenía libertad de movimiento y podía expresar sus opiniones libremente. Pero en La Alemania Democrática las cosas eran muy diferentes, había reglas más estrictas sobre cómo deberían comportarse las personas y una policía secreta, la Stasi, que supervisaba lo que hacía la población.
Construcción fugaz
Durante la “separación” de las Alemanias, se estima que entre 1949 y 1961 alrededor de 2.7 millones de personas abandonaron la RDA y Berlín Oriental, esto según la página web oficial del Muro de Berlín.
Las migraciones eran tantas que el gobierno de la RDA decidió poner fin a esta “libertad” y entonces, en 1961 las autoridades de la RDA ordenaron que se construyera un muro que dividiera el este y el oeste de Berlín para evitar que la gente cruzara de un lado al otro.
La noche del 13 de agosto de ese año se edificó un muro con grandes rollos de alambre de púas, pero en semanas posteriores el alambre se sustituyó con concreto y losas de hormigón. Así nació en gran Muro de Berlín.
El muro que transcurría por el centro de la ciudad y que separaba Berlín Oriental de Berlín Occidental tenía una longitud de 43 kilómetros y 8 pasos fronterizos en total.
El control era demasiado. El Muro contaba con dos muros, uno interno y otro externo, vallas electrificadas, torres de vigilancia, perros guardianes, una zanja antivehículos y miles de policías y soldados que podían disparar a quién osase cruzar la fortificación.
La caída
Muchos piensan que la caída del Muro de Berlín fue de un día para otro, pero en realidad fue un proceso social y político lento.
De acuerdo con Carmen Claudín, investigadora especializada en historia rusa y soviética del Barcelona Centre for International Affairs (CIDOB) —un think tank con sede en Barcelona y especializado en asuntos internacionales—el cambio se logró gracias a los “vientos políticos” que comenzaban a surgir Moscú.
De acuerdo con Claudín, la caída del muro no hubiera sido posible sin los ideales de Mijail Gorbachov, abogado y político ruso que en ese entonces fue nombrado secretario general del Partido Comunista.
Gorbachov tenía ideas muy diferentes a las que en ese entonces rondaban en la URSS y lo demostró con su política «Glasnost» (apertura, transparencia), que consistía en, básicamente, eliminar cualquier acto, táctica o acción represiva estalinista devolviéndole la libertad a los ciudadanos rusos.
“Gorbi, Gorbi” terminó siendo el grito popular de los rusos para exigir el cambio. Y con esto vinieron las protestas pacíficas que se extendieron por toda Alemania Oriental.
Así, entre protestas y sustituciones en el gobierno, el 9 de noviembre de 1989, 28 años después, el anuncio de Guenter Schabowski, portavoz del gobierno de la RDA, precipitó la caída del Muro: las fronteras se abrirían oficialmente.
A partir de las 21:20 horas de esa noche, miles de personas cruzaron en las siguientes horas a Alemania Occidental, algunas por primera vez en sus vidas, provocando la rápida caída del muro.
Reunificación
La caída del Muro de Berlín le otorgó a Alemania una reunificación casi inmediata gracias a que en Alemania Occidental pudieron terminar con las carencias que conocía en la RDA.
Muchos lo calificaron como milagro ya que esta revolución pacífica de 1989 llevó a desaparición de Alemania Oriental en menos de un año.
El entonces líder de Alemania Occidental, Helmut Kohl, inició las negociaciones que conducirían a la rápida reunificación del país.
Kohl convenció a Gorbachov de retirarse de Alemania Oriental. Los 350.000 soldados soviéticos estacionados en el Este fueron enviados a casa.
El 3 de octubre de 1990 la reunificación se hizo realidad y ese día dejó de existir formalmente la RDA.
Sin embargo, pese a que Alemania es hoy en día uno de los países más ricos del mundo y motor económico de Europa, las diferencias entre este y oeste son aún visibles en términos económicos y sociales.
Con información de BBC.