La tensión política entre las dos Coreas no es nada nuevo y hoy se terminó de confirmar que no hay futuro amistoso para estas naciones, pues Corea del Norte hizo explotar la oficina de enlace que se utilizaba para las conversaciones con Corea del Sur.
El edificio de cuatro pisos está ubicado en la ciudad de Kaesong, en el lado norcoreano de la zona desmilitarizada que divide a ambos países. Este acontecimiento se une a la serie de amenazas que la nación norcoreana ha emitido contra Corea del Sur en los últimos días.
De acuerdo con CNN, una declaración publicada el martes pasado por los medios estatales de Corea del Norte anunciaba que Pyongyang, la capital del país, estaba bajo una “campaña de represalias intensiva” tras los planes de un grupo de desertores de lanzar globos para enviar folletos antinorcoreanos al norte de la zona desmilitarizada.
Estos planes le costaron a Corea del Sur el acuerdo que el presidente Moon Jae-In había hecho con Kim Jong-Un en 2018, cuando por fin pudieron tener una cumbre para acordar que no habría más “actos hostiles”, y que además se llevaría a cabo la “eliminación de sus medios, incluida la transmisión a través de altavoces y la distribución de folletos” a lo largo de la frontera que comparten ambos países.
Y bueno, fue precisamente la oficina que se había reactivado hace dos años para ayudar a la comunicación entre naciones la que hoy explotó y se consumió en llamas.
¿La justificación? “El reciente tonto acto de atrevimiento lastimó la dignidad de nuestro liderazgo supremo”, decía la declaración en KCNA.
Y la siguiente línea es algo que da escalofríos y que, al parecer, los norcoreanos se tomarán muy en serio: “El mundo verá claramente cuán severo castigo impondrá nuestra gente a las autoridades de Corea del Sur y cómo eliminarán la escoria humana de la tierra”.
Desde que se anunció el presunto lanzamiento de globos con los folletos que se oponen al régimen, la situación se mantiene muy tensa. De acuerdo con las noticias estatales KCNA, Kim Yo Jong, hermana de Kim Jong-Un y la segunda persona más poderosa en ese país, la semana pasada aseguró que los actos de esos desertores deberían ser castigados y los acusó ser “traidores, escoria humana e indeseables que se atrevieron a dañar el prestigio absoluto de nuestro Líder Supremo que representa a nuestro país y su gran dignidad”.
Supuestamente en esa declaración ya anunciaba que la oficina que explotó el día de hoy sería reducida a cenizas. Todavía no queda claro si había alguien en el lugar de la explosión.
