En la Unidad de Manejo y Aprovechamiento sustentable de vida silvestre en Coatepec Harinas resguardan a esta especie y otras más, como el venado cola blanca
Texto: Carlos Pérez
Imagen: Jesús Mejía
Al sur del Estado de México se encuentra Coatepec Harinas, un municipio que resguarda un santuario de 16 hectáreas. Ahí, un equipo multidisciplinario de profesionistas y voluntarios contribuyen al sostenimiento del único santuario de lobo mexicano en el país, así como a la conservación y rehabilitación de distintas especies de fauna mexicana.
La bióloga Itadehui Martínez Hernández nos dijo en entrevista que cuando empezaron a impulsarse las Unidades de Manejo y Aprovechamiento sustentable de vida silvestre (UMAs), se buscaba fomentar la crianza y la reproducción de algunas especies, así como contrarrestar su venta ilegal.
Sin embargo, de unos años para acá las cosas se pusieron feas, pues los apoyos para sostener estos lugares comenzaron a escasear, “por lo mismo muchas UMAs se han visto afectadas y tuvieron que cerrar sus puertas, o buscar otras alternativas para conseguir recursos, para poder subsistir”.
¿Cómo salvar este santuario natural?
Todo pasó por la mente de las personas que cuidan esa UMA, menos cerrar y el equipo integrado por veterinarios, una bióloga y una psicóloga decidió lanzar una convocatoria al público en general, ¿para qué?
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Pues la idea fue integrar un voluntariado en el que las y los participantes apoyaran en la mejora de las instalaciones; a cambio, conocerían la enorme chamba que se hacen ahí.
“La intención es que nos ayuden en las actividades y lo que ofrecemos es que tengan esta experiencia, este contacto con los animales, que los puedan ver y conocer, saber que el apoyo que nos están dando es para la conservación de especies que lo requieren, que están en peligro de extinción”, nos explicó Itadehui.
El cuidado de las especies
En la UMA de Coatepec Harinas se dedican principalmente al cuidado del venado cola blanca mexicano y del lobo gris mexicano. También es un centro de rehabilitación de fauna silvestre y por eso reciben ejemplares decomisados y entregas voluntarias, por ejemplo, aquellos animales que han sido atropellados.
Los animalitos recibidos en la UMA pasan por un proceso de rehabilitación conductual y clínica; además son evaluados para definir si es posible reintroducirlos en su hábitat natural o se mantienen en las instalaciones para apoyar en la educación ambiental que se brinda a los visitantes.
A pesar del esfuerzo que hacen, el apoyo para ellxs escacea: “el trabajo que hacen con lo que tienen es impresionante, es admirable. Se requiere también que la sociedad se involucre, que asista a las UMAs, las visite, que tenga contacto con estas instituciones […] para ver cómo apoyar a este tipo de instalaciones”, nos dijo la bióloga.
Itadehui también nos compartió que el principal apoyo de la UMA Coatepec Harinas proviene de la visita con turismo sustentable, pues a las y los visitantes les solicitan donativos y, en algunos casos, también aceptan donativos en especie.
Mientras, en el periodo previo a la reapertura de la UMA, el voluntariado es una buena opción para contribuir con este esfuerzo.
Ezequiel Blancas, uno de los voluntarios y estudiante de la carrera de medicina veterinaria, expresó que acudió a este sitio porque le interesa apoyar la conservación y tener contacto con la fauna, especialmente con el lobo que está en peligro: “hace falta mucho apoyo tanto por la población como de manera gubernamental, faltan ganas de cuidar nuestro planeta que es el único que tenemos”, dijo.
¿Quieres apuntarte a un voluntariado?
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