El presidente Andrés Manuel López Obrador cumple 68 años este sábado. El “cabecita de algodón” es amor platónico de millones (unos 30 según la última elección) y agruras de otros. Es un día que no puede pasar desapercibido, por eso, queremos hacer una mesa de regalos para la ocasión.
Fiesta enlonada en Reforma
Lo importante es estar acompañado. Podemos tomar prestada la avenida Reforma, una de las más bonitas del país, y poner lonas amarillas, mesas, canchas de fútbol. En la fiesta se pueden hacer juegos de ajedrez, talleres literarios, conciertos y hasta ventas de palomitas. Estarán invitados escritores, políticos, obreros, estudiantes… de todo pues. Eso sí, con sana distancia.
Un trenecito, un avión y legos
Los juguetes son regalos bienvenidos siempre. El espíritu infantil no se pierde nunca. Le podemos hacer llegar al presidente un avioncito de juguete, podría ser pintado de verde, pero no queremos actitudes bélicas. El regalo se lo entregamos el 21 de marzo de 2022 en Zumpango. Otra opción puede ser un trenecito, el modelismo ferroviario es una cosa bárbara. Coleccionistas pueden llegar a pagar hasta 3 mil euros por un tren. El presidente se merece uno de 150 mil millones. *selva se vende por separado. Pero si no es suficiente podemos llegar con una caja de legos. Con ella, el mandatario puede hacer una refinería a escala o un estadio de beisbol.
Contador de mano
¿Has visto los contadores de los guardias en los bailes y conciertos? Los contadores son estas maquinitas que al apretar un botón se agrega un número, por eso de la mala memoria. Así el presidente podrá contar cifras muy largas como los 30 millones de votos que tuvo o cifras muy pequeñas como los simpatizantes de FRENAAA. Cuentas claras, expresidentes juzgados…
Cubrebocas
Casi todos queremos al viejito chulo, pero nos preocupa que ande sin cubrebocas en una pandemia que ha acumulado casi 100 mil contagiados en México y 52 millones en el mundo. Sí, sabemos que la Organización Mundial de la Salud reconoce que la mascarilla no basta y que debe ser parte de un grupo de medidas preventivas, pero no está de más que López Obrador use uno. Más vale, “vaiga a ser”.
Calcetines
Por moralmente derrotada que esté, la oposición existe. AMLO no es monedita de oro y puede ser que no sea santo de tu devoción. Si eres de las personas que cree que seremos Venezuela y lo odias con todo tu corazón, puedes regalarle unos calcetines. A nadie le gusta que le regalen calcetines.
¡Feliz cumple, cabecita del algodón!
